La Moncloa
Unos objetivos que marcan el camino a seguir por los diferentes Estados miembros y que “incorporan la igualdad entre mujeres y hombres como un elemento necesario no sólo para la recuperación del empleo en la coyuntura de crisis, sino para hacer realidad el nuevo modelo de crecimiento inteligente, sostenible e integrador de cara a la próxima década”, ha destacado la ministra de Igualdad española.
Aído ha señalado que la igualdad ha constituido uno de los ejes fundamentales de la Presidencia española, abordándola desde todas las perspectivas, y ha recordado que en el anterior Consejo EPSSCO, la Unión Europea dio un paso histórico en la lucha contra la violencia de género con la aprobación de manera unánime de la propuesta española en esta materia.
Asimismo, la titular de Igualdad ha señalado que para remontar el crecimiento desde una base sólida, “Europa debe contar con el potencial, la capacidad y el conocimiento de toda la ciudadanía”. Por ello, la ministra ha subrayado que “el objetivo del 75% de tasa de empleo en Europa 2020 tendrá en cuenta tanto a hombres como a mujeres”.
Los datos indican que para conseguir este objetivo habrá que concentrar un especial esfuerzo en la incorporación de un mayor número de mujeres al mercado laboral. Entre otros, destaca el hecho de que el 60% de las personas que obtienen una titulación superior en la UE son mujeres, algo que no se traslada al mercado de trabajo, donde, mientras los hombres trabajan en un 76%, el porcentaje para las mujeres se sitúa en un 63%. Un ámbito donde las diferencias también afectan al salario, con una brecha salarial que alcanzó una media el pasado año del 17,4% en la UE y sobre la que también se va a incidir en la Estrategia 2020.
Entre las directrices acordadas, destacan también en materia de igualdad las que contemplan la superación de estereotipos de género en la educación y en la orientación laboral.
Asimismo, en cuanto a la lucha contra la pobreza, también abordada en este Consejo, se ha incluido una especial atención en el caso de las mujeres, dado que corren un mayor riesgo de pobreza que los hombres al percibir salarios más bajos o responsabilizarse en solitario de tareas no remuneradas vinculadas al cuidado de hijos e hijas o personas dependientes.
La Presidencia española ha presentando el Informe de progreso de la propuesta de Directiva del Consejo sobre la aplicación del principio de Igualdad de Trato entre personas con independencia de su edad, religión o creencias, discapacidad u orientación sexual.
Se trata de una propuesta sobre la que se viene trabajando desde 2008 y que en este semestre de Presidencia española ha conseguido importante avances sobre todo en discapacidad, estableciendo compromisos para el conjunto de los Estados miembros en materia de accesibilidad y la adaptación de infraestructuras y edificios.
Sobre la citada Directiva, la ministra de Igualdad ha explicado que “queda mucho trabajo por hacer y respaldaremos a la Presidencia belga, igualmente comprometida en la redacción de una norma que proteja más allá del ámbito del trabajo a las ciudadanas y ciudadanos de la UE que puedan sufrir discriminación por diferentes causas”.
La Presidencia española ha informado del acuerdo alcanzado con el Parlamento en la propuesta de Directiva sobre Igualdad de trato entre mujeres y hombres que ejercen la actividad autónoma y que será adoptada en el próximo Consejo.
Por primera vez, Europa reconoce a los cónyuges o parejas de hecho el derecho a la protección social, así como el derecho de las trabajadoras autónomas y de los cónyuges o parejas a percibir una prestación por maternidad durante un mínimo de 14 semanas. Se trata de un avance histórico que equipara la protección a la maternidad de las mujeres trabajadoras con independencia del régimen laboral. Y que viene a dar cobertura a aquellas mujeres que han contribuido y contribuyen junto a sus parejas con su trabajo diario al sostenimiento de negocios en todos los países. “Saldamos así una deuda que teníamos pendiente con las mujeres autónomas y superamos una vieja barrera a favor de la igualdad de mujeres y hombres en el ámbito del empleo”, ha concluido la ministra.