Programa de Apoyo Empresarial a las Mujeres (PAEM)

El tipo efectivo en Sociedades se encuentra ya por debajo del 20%

04/08/2009

Cinco Días

 

Nunca en la historia reciente de España, el tipo efectivo del impuesto sobre sociedades -el gravamen real que se aplica a los beneficios empresariales- se había situado por debajo del 20% como sucedió el año pasado, según el estudio anual de recaudación tributaria que acaba de publicar Hacienda. El informe también corrige el tipo efectivo de 2007, que en un primer momento situó en el 22,6% y ahora ubica en el 19,8%.

El tipo real en Sociedades descendió en 2008 hasta el 18,4%, en total, 6,6 puntos porcentuales por debajo de 2004. Y se sitúa casi al mismo nivel de gravamen que las rentas de capital, que tributan al tipo único del 18%.

La tarifa del impuesto sobre sociedades no ha cesado de caer en los últimos años debido a la reforma aprobada por el Gobierno en 2006 que -por primera vez desde 1978- rebajó el tipo general del 35% al 30% y, para las pymes, del 25% al 20%.

Por otro lado, la diferencia entre el tipo nominal (30%) y el efectivo (18,4%) se explica por la multitud de deducciones que contiene el impuesto de sociedades. Así, el sistema tributario español se distingue por tener un impuesto alto en comparación con la media europea pero, a cambio, mantiene muchas más deducciones. España es el cuarto país de la UE con un tipo nominal más alto, sólo le superan Malta, Bélgica, Francia e Italia. Sin embargo, algunos estudios indican que el tipo real que pagan las empresas en España se encuentra por debajo de la media europea.

El número de declarantes del impuesto de sociedades se situó en 2007 -último dato publicado por Hacienda- en 1,4 millones. La mayoría, el 91%, son pymes no financieras, mientras que las grandes empresas suponen sólo un 2,1% del total.

En 2008, la base imponible del impuesto cayó en torno a un 30% debido al descenso de los beneficios empresariales, lastrados por "el menor crecimiento de las ventas, el aumento de costes salariales, energéticos y financieros", entre otros motivos.

Ello derivó en una caída sin precedentes de los ingresos tributarios ligados al impuesto sobre sociedades. El Estado pasó de recaudar 44.823 millones en 2007 a 27.301 millones en 2008. El descenso sorprendió al Gobierno que en los Presupuestos estimó que recaudaría 17.000 millones más. Nunca antes se había producido una diferencia tan abismal entre lo presupuestado y la realidad. En el primer semestre, la situación no mejoró, y la recaudación por Sociedades cayó un 24,7%.

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