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A finales de 2012 la franquicia empleaba a 210.000 personas en España, lo que supone la generación de más de 3.000 puestos de trabajo en un año. Además, las 899 enseñas que operan en nuestro país integran un total de 60.555 negocios, un 3,8% más que en 2011. Estos datos, extraídos del informe La franquicia en cifras 2013, realizado por Mundo Franquicia Consulting, confirman la estabilidad de este sistema de negocio.
¿Cuál es la tendencia para este año? Santiago Barbadillo, director general de Barbadillo Asociados, opina que "todo parece indicar que será un buen ejercicio, en el que no sólo se iniciarán nuevos proyectos, sino también en el que entrará más capital. El perfil del franquiciado no será solo el de un mero inversor, sino que aumentarán los profesionales que ven este modelo de negocio la oportunidad de generar autoempleo".
Valor añadido
Las mayores oportunidades están ligadas a la especialización. Javier Pelayo, socio director de la consultora T4 Franquicias, considera que "dar valor añadido y un contenido específico son las grandes bazas de este tipo de comercio. Más que de sectores con grandes oportunidades, habría que hablar de marcas. El protagonismo es de las firmas con nombre y apellido que saben atender las necesidades del público y generar una experiencia con valor añadido que le enganche".
Mariano Alonso, director general de MundoFranquicia Consulting, apunta que "como en 2012, las enseñas de viajes, bisutería, belleza o dietética serán las más solicitadas por los emprendedores". Por tanto, el sector servicios continuará siendo el más dinámico. En él, las enseñas de restauración especializadas en un tipo de comida y los establecimientos low cost con un ticket medio por debajo de los 20 euros son algunos de los modelos de negocios más atractivos.
Pero también hay nuevas tendencias que adquieren notoriedad. Barbadillo destaca los servicios de formación: "La enseñanza de idiomas y otras materias específicas ligadas a la cultura están experimentando una gran demanda tanto de franquiciados como de clientes".
Alonso, concreta que "las mayores posibilidades están vinculadas a los negocios con inversiones de apertura moderadas y que no precisen amplias estructuras ni locales ubicados en zonas de primer orden comercial. El mayor desembolso debe destinarse a I+D+i. Un buen soporte tecnológico es sinónimo de futuro".