Programa de Apoyo Empresarial a las Mujeres (PAEM)

Propuesta para terminar la jornada laboral a las seis de la tarde

23/12/2005

Expansión & Empleo

  El Gobierno quiere que el Plan Concilia de la Administración sea un ejemplo para el sector privado. España es el país donde más horas se trabaja, pero su productividad es de las más bajas.

Estar en el trabajo no es lo mismo que estar trabajando. Algo así pasa en España si se comparan sus niveles de productividad con los del resto de Europa. Los españoles gastan más horas en el puesto laboral que sus socios comunitarios. Sin embargo, su productividad es la más baja de la UE, tan sólo superada por la de los griegos y portugueses.

La razón apunta a que trabajar bien no significa permanecer más horas en el puesto de trabajo. En España existe un desfase entre la jornada laboral oficial y la efectiva, la que realmente utiliza el empleado para desempeñar su función. Para combatir este problema, el Gobierno propone la siguiente fórmula: flexibilizar los horarios para adecuarlos a las necesidades de los ciudadanos, limitar el tiempo dedicado a la comida y dormir más horas. Estas son las conclusiones del Libro Blanco España, en hora europea, elaborado por la Comisión Nacional para la reorganización de los horarios laborales, y en el que se compara la situación de España con la del resto de la Unión.

En el acto de presentación estuvo el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, quien hace unas semanas lanzó el Plan Concilia, un programa para que los funcionarios públicos puedan compaginar su vida laboral y familiar. Este objetivo “es una apuesta firme” y “queremos dar ejemplo en la racionalización de horarios al sector privado”, explicó Jordi Sevilla.

Malos hábitos

El estudio constata que la jornada laboral debería acabar a las seis de la tarde para acercarse lo más posible al ritmo de trabajo del resto de Europa. Esto implica comenzar antes y dedicar sólo una hora a la comida (de doce a una del mediodía), de modo que el trabajador entre a las ocho de la mañana y salga a las cinco. “Las empresas que aplican un plan de horarios flexibles de entrada y salida y a las seis de la tarde todos sus empleados están en casa son más rentables y tienen mayor productividad, porque la gente se encuentra comprendida, mejor tratada y más realizada”, explica Ignacio Buqueras, presidente del organismo que ha elaborado el estudio. Los horarios actuales “causan verdaderos problemas y traumas familiares”, añade.

Pero racionalizar el trabajo conlleva también modificar el estilo de vida de los españoles. Precisamente, según el informe, los “malos” hábitos influyen directamente en la productividad del trabajador. Desayunos ligeros, comidas copiosas con largas sobremesas que se prolongan hasta las cuatro, cenas tardías y, sobre todo, la noche. Los españoles son los reyes de la madrugada. Prueba de ello es que duermen cuarenta minutos menos al día que el resto de los europeos. Tiempo que pierden, según el estudio, frente al televisor. Buqueras considera que esta falta de sueño es la principal causa de los accidentes laborales y de tráfico, algo que sí encabeza España.

Cómo alcanzar el objetivo

La Administración, por medio del Plan Concilia, comenzará a aplicar este tipo de políticas a partir del 1 de enero. El siguiente paso será trasladar la idea al sector privado. “La racionalización de los horarios no puede ni debe hacerse a golpe de decreto”, dice el informe, que propone una legislación en la que las empresas se puedan adaptar a sus necesidades particulares este tipo de políticas. Pero también pide más libertad de horarios para el pequeño comercio que la que existe actualmente, así como una revisión de las horas de escuela, para poder coordinar este cambio que, según Buqueras, “no sería mayor al que tuvo la introducción del euro”.

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