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"Los ICO no están funcionando como yo quisiera". Así se confesaba Mariano Rajoy el pasado sábado ante un grupo de emprendedores en Tarragona. Y tenía razón el presidente, en lo del funcionamiento, aunque está en su mano mejorarlo. Porque los préstamos formalizados por el Instituto de Crédito Oficial durante el primer trimestre de año apenas alcanzan el 7% de los 22.000 millones de euros que el brazo financiero del Estado tiene asignados para líneas de financiación durante el año 2013.
En concreto, los últimos datos de la actividad crediticia del ICO muestran cómo las operaciones formalizadas entre enero y marzo de este año se elevan a 1.539 millones de euros, que se destinaron a financiar cerca de 23.500 operaciones de autónomos y empresas.
Esta cifra de capital concedido supone un descenso del 70% con respecto a las formalizaciones realizadas entre enero y marzo del año pasado, en que el préstamo otorgado se elevó hasta 5.105 millones de euros. Sí se observa una ligera mejoría, del 2,3%, en la comparación con el último trimestre de 2012.
El Sabadell sí apuesta
Del crédito total concedido en los tres primeros meses de este año, el 94%, es decir, 1.446,6 millones de euros, se realizaron a través de las líneas de mediación que se gestionan a través de las entidades financieras privadas. De ellas es el Sabadell el único banco que parece apostar por el crédito oficial acaparando esta entidad en torno al 30% de todas las formalizaciones realizadas hasta marzo.
Los datos del ICO muestran también que del total de préstamos formalizados, 1.355 millones de euros se distribuyeron en operaciones realizadas mediante la Línea ICO-Empresas y Emprendedores, destinada a financiar inversiones en España y necesidades de liquidez.
Mientras, a través de la Línea ICO-Internacional y la sublínea ICO-Exportadores, dirigidas a potenciar la salida al exterior de las empresas españolas se han financiado más de 200 proyectos, por importe de 53 millones de euros.
Dos son las razones fundamentales que explican esta mínima demanda de los créditos del ICO por parte de los emprendedores: los criterios de riesgo y el desconocimiento de la oferta.
Respecto a este último factor, los datos avanzados ayer por el Observatorio del Trabajo Autónomo de ATA revela que únicamente el 33,9% de los autoempleados de este país ha solicitado uno de los créditos del ICO en los últimos cinco años, período que coincide con el inicio de la crisis económica.
Además, la respuesta del Instituto de Crédito Oficial a la solicitud de créditos por parte de los autónomos lejos de mejorar a la de las entidades financieras, "se torna mucho más restrictiva" puesto que el 70,2% de las operaciones solicitadas por los autónomos fue denegada.
Frente a esta elevada cifra de denegaciones, sólo el 23,4% de los autónomos afirma que el ICO le concedió el crédito solicitado.