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La Administración admite que no comprobó el sistema de presentación electrónica del IVA
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"La improvisación y la buena fe de Hacienda en el sistema han sido las causantes del caos" afirma Sebastián Reyna, seccretario general de Upta (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos). El desorden que se ha generado por la tramitación electrónica del IVA ha tocado de nuevo al colectivo más vulnerable. Según las asociaciones de autónomos de los 250.000 activos que no emplean herramientas telemáticas para la presentación de sus impuestos, serán 25.000 los que no habrán podido rendir cuentas dentro del plazo establecido, especialmente a aquellos con edades superiores a 55 años y los integrados en sectores con escaso acceso a las nuevas tecnologías. Una cifra que podría ser superior si atendemos a los datos que facilitan desde la Agencia Tributaria, "desde la aprobación de la Orden se solicitaron 132.000 'pines' y 73.000 certificados de firma electrónica" Es decir, 45.000 trabajadores por cuenta propia son los que quedarían fuera de plazo.
Lola Herrera, portavoz de Asefiget (Asociación Española dede Asesores Fiscales y Gestores Tributarios) coincide con la apreciación de Reyna y apunta que el colapso se debe a que "los datos que dispone Hacienda del contribuyente no están actualizados o contienen errores por lo que no es posible habilitar el código Pin 24 Horas. A ello se añade la desinformación".
Fuentes de la Agencia Tributaria (Aeat) reconocen la existencia de incidencias técnicas "hace tres semanas hubo problemas con las presentaciones vía sms, que se debieron a incompatibilidades con las operadoras de móviles con las que trabajamos" y que "se subsanaron de forma inmediata". En su defensa alegan que "diferentes equipos de trabajo han sido los encargados de probar, previamente, las nuevas formas de presentación (PIN24H). Como resultado, se ha comprobado que no ha habido ninguna incidencia relevante relacionada con fallos de nuestro servicio".
Dificultades técnicas
Sin embargo las dificultades técnicas no se limitaron sólo a los mesajes de texto. Las confirmaciones vía ordenador también causaron estragos entre los abnegados autónomos "cuando se enviaban las solicitudes de confirmación se caía el sistema porque las versiones no estaban actualizadas", explican desde Upta. Salvador Faura, Consejero de Gestha (Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda), apoya esta tesis y reconoce que "el programa en sí da problemas" y que "la transición debería haber sido progresiva".
Lorenzo Amor, Presidente de la Federción Nacional de Asociaciones de Autónomos (Ata) añade que "a pesar de las trabas que elimina el sistema, hay que reconocer que el trámite del Pin 24 horas es farragoso y la aplicación compleja". Un hecho que también es reconocido por la Aeat "la mayor parte de la asistencia técnica solicitada ha venido derivada de la configuración incorrecta de los equipos para adecuarse a los requisitos técnicos necesarios".
Respecto a la falta de información recibida por el colectivo, Reyna destaca que "no se ha tenido en cuenta la brecha digital de los autónomos". Afirmación que la Aeat desmiente "durante la primera quincena de diciembre se remitieron un millón de cartas y se celebraron más de 300 sesiones informativas con asociaciones y profesionales".
La voluntariedad de las agrupaciones de autónomos y Colegios Profesionales que, en palabras de Reyna, "de manera gratuita, hemos ayudado a realizar el trámite" ha favorecido que el número de afectados no se haya disparado aún más.
Flexibilidad y tolerancia
El velado mea culpa entonado por Hacienda se ha materializado en la comprensión con los 'fuera de plazo'. Fuentes del propio Ministerio comentan que serán "flexibles y comprensivos" a la hora de aplicar las sanciones legales que implica la demora en las presentaciones. "Somos conscientes de las complicaciones que supone enfrentarse a un sistema nuevo", añaden. Esta flexibilidad es corroborada por Salvador Faura, que explica que "tenemos la sensación de que una vez presentados los modelos -aunque sea pasado el día 30- no se requerirá el pago de sanción alguna".
Los representantes de los autónomos también se han pronunciado al respecto y tanto Amor como Reyna esperan que Hacienda "sea flexible" y no se lleguen a aplicar las sanciones. De hecho en las cartas informativas que se remieron desde la Agencia Tributaria no se hace mención alguna a posibles sanciones por las demoras en los plazos de presentación de las declaraciones.
Sanciones que por otro lado, nada tienen que ver con las cifras que han sido difundidas a través de redes sociales y que han hecho correr tinta en otros medios de comunicación. Faura, niega categóricamente que las multas asciendan a los 1.500 euros que se han dado por ciertos, "desconocemos de dónde sale esa cifra. Las sanciones máximas que se establecen para las presentaciones fuera de plazo son de 300 euros, que con la reducción se quedan en 225". Afirmación compartida por Sebastián Reyna, secretario General de Upta (Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos) que explica que "la cifra que se está dando no es correcta y no sabemos de dónde proviene".
Con todo ni la desinformación ni las prisas han devaluado los beneficios del sistema para los reperesentantes de los autónomos, que no dudan valorarlo de forma muy positiva. Lorenzo Amor destaca que "los autónomos de Ata estamos contentisimos con el sistema y nuestros asesores no han recibido quejas". Sebastián Reyna puntualiza que "el sistema elimina trabas", pero que "el Gobierno debería invertir más en formar a los autónomos en promocionar la firma digital".
